Dolor y enfermedad articular.

A todos en algún momento de nuestra vida nos ha dolido una articulación, y generalmente no le prestamos ninguna importancia porque con el tiempo el dolor desaparece; sin embargo, hay síntomas a los que debemos prestar atención para detectar alguna enfermedad oportunamente.

La artrosis es la enfermedad articular más frecuente y generalmente se desarrolla en personas mayores de 50 años. Por otro lado, la osteoartritis es la enfermedad reumática más frecuente a nivel mundial y constituye una de las principales causas de dolor e incapacidad en el adulto. 

Se estima que más del 80% de los de las personas mayores de 60 años presentan alguna alteración radiológica al menos en una articulación de su cuerpo. 

Como en todas las enfermedades, existen factores de riesgo para desarrollar una enfermedad articular, y de forma general pueden dividirse en cuatro tipos: 

  1. factores modificables 
  • Sobrepeso y obesidad 
  • Sobrecarga articular 
  • Debilidad muscular 
  • Actividad física de alto impacto 
  1. Factores potencialmente modificables 
  • Enfermedad inflamatoria articular 
  • Trauma mayor 
  • Distensión articular 
  1. Factores no modificables 
  • Edad avanzada mayor a 50 años 
  • Sexo femenino 
  • Factores genéticos 
  1. Factores para la progresión de la enfermedad articular 
  • Sedentarismo 
  • Ansiedad 
  • Depresión 

¿Cómo prevenir la enfermedad articular? 

Como muchas otras enfermedades crónicas hay un componente genético importante, pero podemos prevenirlas o retrasarlas, con un estilo de vida saludable:  

  • Realizando actividad física de impacto bajo y moderado 3 veces a la semana y haciendo caminatas y ejercicios de fortalecimiento todos los días, para mejorar la movilidad. 
  • Comiendo sanamente y evitando el consumo de tabaco, sal y alimentos transgénicos. 
  • Manteniendo bajos nuestros niveles de estrés y ansiedad,  
  • Durmiendo y descansando bien y  
  • Realizando visitas periódicas con el médico para revisar nuestro estado general de salud. 

Si percibes que frecuentemente presentas: dolor o rigidez articular, disminución de la fuerza o pérdida de la movilidad, debes acudir con un médico que te indicará cuáles son los estudios de laboratorio y de imagen que debes realizarte para primero diagnosticar el tipo de problema que existe y el tratamiento adecuado para estas dos enfermedades crónicas. 

También es importante que si presentas cualquiera de estos síntomas además incluyas vitamina C (ácido ascórbico), en tu alimentación, ya que esta vitamina es fundamental para la formación de colágeno y el cartílago articular.  

Si tienes cualquiera de estos síntomas agenda tu vídeo consulta para establecer un pre-diagnóstico y canalizarte con nuestros especialistas. Recuerda que nuestro servicio puede ser virtual o presencial, como tú prefieras. 

¿Qué debo hacer si ella me diagnosticaron una enfermedad articular? 

Si tú ya has sido diagnosticado con alguna enfermedad articular te recomendamos estos cuidados  

  • Tratamiento inicial: 
  • Disminuye al menos 5 kilos de tu peso corporal para mejorar sobre todo la función de las rodillas. 
  • Realiza ejercicios de flexibilidad y estiramiento. 
  • Tratamiento no farmacológico 
  • Ejercicios isométricos 3 veces por semana de 10 a 15 repeticiones de 5 a 10 segundos para fortalecer tus articulaciones 
  • Realiza ejercicios aeróbicos 
  • Utiliza rodilleras mientras te ejercitas 
  • Terapia de electroestimulación (TENS). En esta terapia se aplica corriente eléctrica de baja frecuencia mediante electrodos sobre la piel, con la finalidad de disminuir el dolor y la rígidez así como también, aumentar la fuerza. 
  • Termoterapia. La aplicación de frío, (crioterapia), es una terapia eficaz fácil y de bajo costo. Al realizarla existen mejoras en el dolor, en la movilidad articular, Puede darse masaje con hielo o con compresas frías. Esto ayudara a disminuir la inflamación. 
  • Tratamiento farmacológico. Consiste en el Uso de analgésicos simples de libre venta. Los medicamentos se modifican de acuerdo la progresión de la enfermedad y de los síntomas. 

Progreso de la enfermedad 

De forma general, podemos decir que existen 4 grados o niveles de evolución de la enfermedad 

  • Grado 1 ligero con una dudosa inflamación articular. 
  • Grado 2 leve, con disminución del espacio articular y cambios en la articulación. 
  • Grado 3 moderado mayor disminución del espacio articular, disminución de la función articular y dolor. 
  • Grado 4 severo con poco espacio articular o nulo y deformidad de la articulación. 

¿Es recomendable realizarse una cirugía? 

Cuando el paciente tiene más de 55 años, el dolor es severo la función de la articulación está muy limitada y se está afectando en la calidad de vida es recomendable evaluar el tratamiento quirúrgico. También debe evaluarse esta posibilidad sí: 

  • Hay un dolor articular severo 
  • No se responde al tratamiento conservador ni a los fármacos 
  • Hay evidencia derrame de líquido sinovial que es el líquido que se encuentra dentro de las articulaciones. 

Si tú o algún ser querido presentan estos síntomas, o ya han sido diagnosticados con artrosis o con osteoartritis, pueden mejorar su calidad de vida siguiendo estas recomendaciones, pero sobre todo, atendiéndose con un especialista. Con Vrim Connect tienes médicos de todas las especialidades, No lo dejes para mañana.