¿Sabías que más de 1,500 millones de personas a nivel mundial tienen algún problema auditivo? En América viven alrededor de 217 millones de personas que han perdido en algún porcentaje su oído, esto representa más del 21% de la población de la región, y lo más preocupante es que la mayoría no lo sabe.
Como padres debemos educar activamente a nuestros hijos para que aprendan a cuidar sus propios oídos desde pequeños. Debemos vigilar que no se expongan a ruidos fuertes y también darles ejemplo con nuestros propios hábitos responsables y seguros.
Los problemas de audición no son una cuestión menor, porque cuando las enfermedades del oído no se atienden oportunamente, tienen efectos en su rendimiento escolar. Las niñas y niños pueden presentar dificultad para localizar el sonido, problemas para atender instrucciones e inclusive para aprender a hablar. Y no sólo eso, sino que también la pérdida de la audición puede llevarlos a tener complicaciones en algunos aspectos de su vida como el desarrollo social, afectivo y laboral.
Evaluación desde el nacimiento con el Tamiz Neonatal Auditivo
Este tamiz es una prueba sencilla y rápida que permite detectar cualquier disminución de la audición o sordera en el recién nacido sin causarle dolor ni ninguna molestia. Esta prueba debe realizarse a todos los bebés independientemente de que tengan o no factores de riesgo y el tiempo ideal para que se realice es desde el momento del nacimiento y hasta los 3 meses de edad.
La prueba es muy sencilla: sólo se coloca un pequeño audífono en el oído del bebé durante unos segundos en los que se registra la capacidad auditiva y es todo.
Si con esta prueba se detecta cualquier problema dentro de los 3 primeros meses de vida, existen métodos que pueden evitar limitaciones en el lenguaje tiene el aprendizaje. Si pasado este tiempo el problema persiste, se puede hacer una valoración con un médico audiólogo para darle el tratamiento adecuado.
Cuidar el oído significa: prevenir, identificar y tratar las enfermedades que puedan afectar nuestra audición. Gran parte de la solución es prevenir con medidas muy sencillas, fáciles y rápidas:
- Evita usar audífonos durante tiempo prolongado y con un volumen el gato
- Limita el tiempo dedicado a actividades ruidosas
- Vigila los niveles seguros de tu exposición al ruido
- No utilices hisopos para limpiar tus oídos, porque usarlos inadecuadamente puede ocasionar el efecto contrario: acumulación de cerumen, crear un tapón o peor aún lastimar la membrana timpánica.
- Revisa al menos una vez al año tus oídos acudiendo a una revisión general o con él otorrino laringólogo.
Si quieres tener una vídeo-consulta con alguno de nuestros especialistas sólo agéndala en nuestra app. Cuida los oídos de tus hijos y también los tuyos.